Dos goles de Fernando Torres dieron pie a la goleada del Liverpool (4-0) ante el Blackburn Rovers y permitieron al conjunto de Rafa Benítez olvidarse, al menos de manera momentánea, del duro golpe de la Champions.
Pese a que las heridas sufridas frente a los 'blues' en la Liga de Campeones aún estaban recientes en la plantilla del míster madrileño, los 'reds' desplegaban ante su afición un recital futbolístico para proseguir sin incidencias su andadura por la zona alta de la tabla, que sigue liderada por el Manchester tras ganar 1-2 al Sunderland.
Fue una victoria convincente. Benítez introdujo cuatro cambios con respecto al once que cayó ante la plantilla de Guus Hiddink en Europa el pasado miércoles, con Daniel Agger, Yossi Benayoun, Javier Mascherano y Emiliano Insua reemplazando a Steven Gerrard -que como estaba previsto, fue suplente-, Martin Skrtel, Lucas y Fabio Aurelio.
El Liverpool se movió cómodo
No sorprendió que una vez más le tocara estrenar el marcador al talismán goleador del conjunto local. Un 'Niño' Torres inspirado, eficaz, demoledor, que ya avisó a los cuatro minutos de partido con el primer gol. El delantero español marcó desde dentro del área pequeña a un pase de su compañero Jamie Carragher.
Aunque el rival apretaba, Torres volvía a ser demasiado para su rival. A la media hora de partido, su compatriota Xabi Alonso ponía un balón en bandeja para que cabeceara y aumentara la ventaja de los anfitriones.
El Blackburn no supo ya responder y el defensa danés Dani Agger sumó un tanto más a la cómoda victoria 'red'. Y no fue el último. Cuando faltaba un minuto para concluir el encuentro, el francés David N'Gog, con un remate de cabeza a un balón que le lanzó el brasileño Lucas Leiva, burló la meta de los Rovers para sellar el festival de goles.
Fuente Marca.com
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